Lección 1
(29 de Marzo al 5 de Abril de 2008)
¿Quién es este hombre Jesús?
Dr. Ekkehardt Mueller
Muchas personas han escuchado de Jesús. Algunos creen que él fue un buen hombre; otros, que Él fue un profeta; otros más, que Él fue el fundador de una nueva religión. Y algunos lo aceptan como su Señor y Salvador. Ya en los tiempos de Jesús las opiniones variaban (Mateo 16:13-14).
I. Las pretensiones de Jesús
En el Nuevo Testamento se encuentran muchas afirmaciones sorprendentes acerca de Jesús. Pero el propio Jesús hizo algunas interesantes declaraciones acerca de sí mismo:
Juan 5:25-27
Él es el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre y resucitará de entre los muertos.
Juan 6:47-48
Él provee vida eterna para aquellos que creen en Él.
Juan 10:30-33
Jesús es uno con Dios el Padre
Juan 14:6
Jesús es el único camino para llegar a Dios, la Verdad personificada, y la Vida.
Juan 17:5
Jesús vivía con Dios antes de la Creación.
Juan 18:37
Jesús es Rey.
Marcos 14:61-62
Jesús es el Cristo, el Mesías. Él se sienta a la derecha de Dios y regresará en las nubes
Mateo 28:19-20
Jesús está con nosotros siempre, aun en el tiempo del fin.
Ésta no es una lista muy abarcante. Pero nos dice que, aunque Jesús fue un ser humano, Él aseveró ser el Hijo de Dios, quien se había hecho hombre para salvarnos. Él es Dios y Creador (Juan 1:1-3), Juez y Rey, y vendrá otra vez.
II. Reacciones de sus oyentes
Mientras Jesús y sus pretensiones fueron rechazadas por una cantidad de sus contemporáneos (Juan 7:46-49), hubo otros que creyeron en Él:
Marcos 15:39
Un gentil (una persona que no era judía), identificado como el centurión romano.
Mateo 16:16
Pedro, uno de sus discípulos.
Juan 11:27
Marta, una mujer que lo seguía.
Juan 20:25-28
Tomas, un escéptico.
Romanos 9:5; Colosenses 2:9
Pablo, quien había perseguido a los cristianos y negado el señorío de Jesús.
Jesús había formado este planeta y había cambiado la vida en él de una manera notable. Influyó en él más que todos los ejércitos que alguna vez marcharon sobre él, más que todos los reyes y gobernaron alguna vez, y más que todas las invenciones que se hicieron alguna vez. El nos dejó sus Mandamientos de amor, su vida ejemplar, y -sobre todo- nos salvó. Más libros se escribieron acerca de Él, más cuadros y esculturas se confeccionaron para retratarlo, más música fue compuesta en honor a Él que para cualquier otra persona que haya caminado en este planeta. Incluso las eras de tiempo se cuentan a partir de Él.
III. Evidencias para la validez de sus pretensiones
Siglos antes de su nacimiento, los profetas del Antiguo Testamento hicieron predicciones detalladas relativas al Mesías que vendría. Se dice que hay más de 300 de esas predicciones que se cumplieron en Jesús. La mayor parte de ellas Jesús no pudo haberlas cumplido por sí mismo aún si él hubiera buscado hacerlo.
Las predicciones incluyen: su genealogía, el lugar de nacimiento, el año del comienzo de su ministerio público, la entrada triunfal en Jerusalén; el hecho de que hablara a través de parábolas; que realizara milagros; su rechazo; la traición, los abusos y burlas a las que fue sometido; su crucifixión; el año de su muerte; su muerte en nuestro lugar; y la resurrección.
Aquí hay algunos ejemplos:
Evento
Predicción
Cumplimiento
Belén como el lugar de su nacimiento
Miqueas 5:1
Mateo 2:1, 5, 6; Lucas 2:1-7
Siglo 8 a. C
Dios utilizó al emperador romano Augusto para el cumplimiento de la profecía, porque poco antes de la fecha del alumbramiento, María y José todavía estaban en Nazaret.
La entrada triunfal en Jerusalén
Zacarías 9:9
Mateo 21:1-9; Marcos 11:7
Siglo 6 a. C.
Jesús entra en Jerusalén
Traición de Jesús
Zacarías 11:12-13
Mateo 26:15; 27:3-7
Treinta siclos de plata serían pagados por el Señor.
Jesús es traicionado por exactamente treinta siclos de plata, Judas arrojó las monedas en el templo.
La crucifixión
Salmo 22:16-19
Juan 20:25; 19:23-24
Siglo 10 a. C.
Jesús fue crucificado, y sus ropas fueron repartidas.
Los huesos del cuerpo de Jesús no serían quebrados
Éxodo 12:46
Juan 19:31-36
Aproximadamente en el siglo 16 a. C.
Los huesos de Jesús no fueron quebrados. El Cordero Pascual era un símbolo de Jesús (Juan 1:29).
IV. Jesús y yo
Las profecías del Antiguo Testamento se cumplieron en Jesús y únicamente en Él. Él fue lo que reclamó ser, el Mesías, el Hijo de Dios, pero especialmente nuestro Salvador (Juan 3:16). Se nos pide que lo reconozcamos y asimismo que creamos en Él.
Dr. Ekkehardt Mueller
Director Asociado
Biblical Research institute
(Instituto de Investigación Bíblica)
Asociación General
Traducción: Rolando D. Chuquimia ©
RECURSOS ESCUELA SABATICABendiciones
(29 de Marzo al 5 de Abril de 2008)
¿Quién es este hombre Jesús?
Dr. Ekkehardt Mueller
Muchas personas han escuchado de Jesús. Algunos creen que él fue un buen hombre; otros, que Él fue un profeta; otros más, que Él fue el fundador de una nueva religión. Y algunos lo aceptan como su Señor y Salvador. Ya en los tiempos de Jesús las opiniones variaban (Mateo 16:13-14).
I. Las pretensiones de Jesús
En el Nuevo Testamento se encuentran muchas afirmaciones sorprendentes acerca de Jesús. Pero el propio Jesús hizo algunas interesantes declaraciones acerca de sí mismo:
Juan 5:25-27
Él es el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre y resucitará de entre los muertos.
Juan 6:47-48
Él provee vida eterna para aquellos que creen en Él.
Juan 10:30-33
Jesús es uno con Dios el Padre
Juan 14:6
Jesús es el único camino para llegar a Dios, la Verdad personificada, y la Vida.
Juan 17:5
Jesús vivía con Dios antes de la Creación.
Juan 18:37
Jesús es Rey.
Marcos 14:61-62
Jesús es el Cristo, el Mesías. Él se sienta a la derecha de Dios y regresará en las nubes
Mateo 28:19-20
Jesús está con nosotros siempre, aun en el tiempo del fin.
Ésta no es una lista muy abarcante. Pero nos dice que, aunque Jesús fue un ser humano, Él aseveró ser el Hijo de Dios, quien se había hecho hombre para salvarnos. Él es Dios y Creador (Juan 1:1-3), Juez y Rey, y vendrá otra vez.
II. Reacciones de sus oyentes
Mientras Jesús y sus pretensiones fueron rechazadas por una cantidad de sus contemporáneos (Juan 7:46-49), hubo otros que creyeron en Él:
Marcos 15:39
Un gentil (una persona que no era judía), identificado como el centurión romano.
Mateo 16:16
Pedro, uno de sus discípulos.
Juan 11:27
Marta, una mujer que lo seguía.
Juan 20:25-28
Tomas, un escéptico.
Romanos 9:5; Colosenses 2:9
Pablo, quien había perseguido a los cristianos y negado el señorío de Jesús.
Jesús había formado este planeta y había cambiado la vida en él de una manera notable. Influyó en él más que todos los ejércitos que alguna vez marcharon sobre él, más que todos los reyes y gobernaron alguna vez, y más que todas las invenciones que se hicieron alguna vez. El nos dejó sus Mandamientos de amor, su vida ejemplar, y -sobre todo- nos salvó. Más libros se escribieron acerca de Él, más cuadros y esculturas se confeccionaron para retratarlo, más música fue compuesta en honor a Él que para cualquier otra persona que haya caminado en este planeta. Incluso las eras de tiempo se cuentan a partir de Él.
III. Evidencias para la validez de sus pretensiones
Siglos antes de su nacimiento, los profetas del Antiguo Testamento hicieron predicciones detalladas relativas al Mesías que vendría. Se dice que hay más de 300 de esas predicciones que se cumplieron en Jesús. La mayor parte de ellas Jesús no pudo haberlas cumplido por sí mismo aún si él hubiera buscado hacerlo.
Las predicciones incluyen: su genealogía, el lugar de nacimiento, el año del comienzo de su ministerio público, la entrada triunfal en Jerusalén; el hecho de que hablara a través de parábolas; que realizara milagros; su rechazo; la traición, los abusos y burlas a las que fue sometido; su crucifixión; el año de su muerte; su muerte en nuestro lugar; y la resurrección.
Aquí hay algunos ejemplos:
Evento
Predicción
Cumplimiento
Belén como el lugar de su nacimiento
Miqueas 5:1
Mateo 2:1, 5, 6; Lucas 2:1-7
Siglo 8 a. C
Dios utilizó al emperador romano Augusto para el cumplimiento de la profecía, porque poco antes de la fecha del alumbramiento, María y José todavía estaban en Nazaret.
La entrada triunfal en Jerusalén
Zacarías 9:9
Mateo 21:1-9; Marcos 11:7
Siglo 6 a. C.
Jesús entra en Jerusalén
Traición de Jesús
Zacarías 11:12-13
Mateo 26:15; 27:3-7
Treinta siclos de plata serían pagados por el Señor.
Jesús es traicionado por exactamente treinta siclos de plata, Judas arrojó las monedas en el templo.
La crucifixión
Salmo 22:16-19
Juan 20:25; 19:23-24
Siglo 10 a. C.
Jesús fue crucificado, y sus ropas fueron repartidas.
Los huesos del cuerpo de Jesús no serían quebrados
Éxodo 12:46
Juan 19:31-36
Aproximadamente en el siglo 16 a. C.
Los huesos de Jesús no fueron quebrados. El Cordero Pascual era un símbolo de Jesús (Juan 1:29).
IV. Jesús y yo
Las profecías del Antiguo Testamento se cumplieron en Jesús y únicamente en Él. Él fue lo que reclamó ser, el Mesías, el Hijo de Dios, pero especialmente nuestro Salvador (Juan 3:16). Se nos pide que lo reconozcamos y asimismo que creamos en Él.
Dr. Ekkehardt Mueller
Director Asociado
Biblical Research institute
(Instituto de Investigación Bíblica)
Asociación General
Traducción: Rolando D. Chuquimia ©
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