martes, 30 de septiembre de 2008

Para pensar...


¿Es la clonación la esperanza humana de vivir eternamente?

por Enoch Aguilar


¨Puede el ser humano crear su propia eternidad? Si no, ¨cómo puede obtener la vida eterna? ¨Existe alguna manera de suplir la necesidad humana de continuar viviendo?
Ewan McGregor y Scarlett Johansson protagonizan la película “The Island ” (La Isla), en la que juegan el papel de residentes de una colonia futurista o “utopía”,1 a mediados del siglo 21. Cómo todos los habitantes de un ambiente cuidadosamente controlado, a ellos se les presenta la idea de que existe un lugar perfecto, el único que no ha sido contaminado pero al cual solo los elegidos pueden ir. Todos los habitantes de este lugar viven con la esperanza de que les llegue el día de ser llamados para ir a ese lugar paradisíaco. Todo va bien hasta que el protagonista de esta cinta comete el grave error de descubrir que el maravilloso lugar y su propia existencia son falsos.
Él y todos los habitantes del lugar son clones humanos y se dan cuenta que ellos tienen más valor muertos que con vida, que su único propósito es “proveer partes de sus cuerpos” a los seres humanos originales, quienes han pagado millonarias sumas de dinero para prolongar su salud y su vida.
¨Qué es la clonación?
La clonación es el procedimiento científico que consiste en tomar el material genético de un ser vivo para obtener otro ser vivo biológicamente idéntico a aquel que proporcionó el material original.2 Según los científicos, la clonación tiene como objetivo mejorar la vida de los seres vivos, ya sea que se trate de animales, plantas o seres humanos.
La mayor problemática se presenta cuando se trata de la clonación de embriones humanos. En general, hay dos tipos de clonación: la clonación reproductiva y la clonación terapéutica (o para investigación científica).3
La diferencia entre las dos radica sobre todo en la finalidad que se pretende conseguir: la primera tiende al desarrollo completo del sujeto mediante la implantación en un útero; en la segunda se utiliza el embrión, en su fase de pre-implantación, para investigación con una finalidad sobre todo terapéutica. Así pues, la finalidad para realizar la clonación sería:
1. Obtener una descendencia humana y utilizar una técnica de procreación asistida más eficaz, con mayor o menor aplicabilidad en ciertas parejas que no han podido tener hijos.
2. Obtener, mediante esta técnica, embriones “sintéticos” (así se les suele llamar) o “cúmulos de células”. La célula madre extraída y debidamente controlada, podría desarrollarse en células específicas nerviosas, cardíacas, musculares, hepáticas, etc, las cuales podían ser utilizadas para tratar diferentes enfermedades o padecimientos.
Más allá de todo el conflicto que estas técnicas generan, cabe preguntarse:
¨Es realmente la clonación la esperanza del ser humano? ¨Podemos confiar en el ser humano para la prolongación de la vida?
Cuando Dios creó al ser humano, lo hizo con el propósito de que viviera eternamente, y aun cuando el pecado entró a este mundo y con él la degeneración de todo lo creado, Dios no quitó del ser humano ese anhelo de perpetuidad.
A través de las edades el hombre ha intentado expresar ese sentimiento de diferentes formas y una de ellas es la ciencia ficción. El caso es que lo que antes era ciencia ficción hoy es una realidad. La clonación es un tema atractivo para seres humanos que anhelan la vida eterna, ya que la perciben como un mecanismo para lograr tal cosa.
¨Qué dice la Biblia?
La Sagrada Escritura dice lo siguiente: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (S. Juan 3:16).
La respuesta a la mayor necesidad del ser humano no la encontramos en las manos de los científicos modernos, aunque nos ofrezcan vaticinios esperanzadores, sino en Dios, quien dio a su Hijo para salvarnos. El Hijo de Dios es la respuesta a la gran necesidad de continuar viviendo. El apóstol Pedro dijo: “Y en ningún otro hay salvación [vida eterna]; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” [vivir eternamente] (Hechos 4:12).
El carcelero de Filipos, ante el asombro de que Pablo y los demás presos no se habían escapado, hizo la pregunta: “Señores, ¨que debo hacer para ser salvo” [vivir eternamente]? La respuesta fue: “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo [vivirás eternamente], tú y tu casa” (Hechos 16:30, 31)
El apóstol Juan dice: “Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él [tenga vida eterna]. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios” (S. Juan 3:17, 18).
El apóstol establece que para tener vida eterna es necesario creer en Jesucristo. En su primera epístola dijo: “Y este es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida” (1 Juan 5:11, 12; ver S. Juan 5:28, 29).
La vida eterna que Jesús nos ofrece viene acompañada de la promesa de que algún día viviremos con él. “No se turbe vuestro corazón —declaró el Señor—; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” (S. Juan 14:1-3).
Lo que Jesús dice es que él es la verdadera esperanza para una existencia mejor, que algún día podremos habitar en la “casa de su Padre”. La necesidad humana de vivir eternamente no se suple con la reproducción de seres humanos idénticos a nosotros, sino al aceptar a Jesús como la vida. Esto significa que desde que aceptamos a Jesús como nuestro Salvador comenzamos a vivir eternamente. Para algunos esa vida eterna será interrumpida por la muerte, a la cual Jesús se refirió en términos de un sueño (ver S. Juan 11:11-14), pero se reiniciará en ocasión de su segunda venida.
El apóstol Pablo nos dice: “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero” (1 Tesalonicenses 4:16; ver también 1 Corintios 15:23).
¨Qué es lo que Dios tiene preparado para los que creen en su Hijo?
El apóstol Pedro dice: “Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia” (2 Pedro 3:13; ver también Isaías 65:17). El apóstol San Juan describe una gloriosa escena: “Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más. Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios, dispuesta como una esposa ataviada para su marido. Y oí una gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como su Dios. Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron. Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.” (Apocalipsis 21:1-5).
En el presente tenemos dos opciones para suplir nuestra necesidad de eternidad: la primera es una falsa utopía que Satanás presenta a la humanidad, la otra es la utopía hecha realidad en Cristo Jesús. ¨Cuál escogeremos?

SI LO ENTENDIERAMOS



La Televisión y el Cine



Tomado de: “El Joven Adventista y su estilo de vida” ACES, 2002, Pág. 39-46



La vida es más que un deporte para espectadores
Durante meses, Nancy había oído acerca de una película aun antes de que se estrenara en el cine la semana pasada. Todos sus amigos y amigas hablaban de ella durante el receso para almorzar. Su hermana que no era adventista la había visto dos veces desde su estreno. En la televisión, Nancy había visto reseñas de la película y sabía exactamente que era la clase de espectáculo que ansiaba ver. No quería esperar hasta que la pusieran en video. Además, había escuchado que los efectos especiales eran fantásticos y deseaba verlos en la pantalla del cine. )Debía ir a verla al cine solamente esta vez, ya que ella no iba mucho al cine, entiendes?
)Qué hay de malo en esta descripción? No es el que Nancy, una joven adventista pensara en ir al cine. Aunque los adventistas han evitado tradicionalmente el cine, algunos jóvenes adventistas hoy no pensarán dos veces antes de ir a ver una película. No, el problema real con este marco hipotético, es que Nancy ni siquiera considera los valores de la película que está pensando ir a ver. En vez de eso, se preocupa dónde la va a ver.
Satanás es muy astuto. Se imagina que si puede hacer que nuestro dilema sea dónde ver algo más bien que qué ver, puede introducir a hurtadillas toda clase de asuntos cuestionables e incluso los que son totalmente malos. Y nosotros no nos daremos cuenta hasta que sea demasiado tarde.
Durante años la iglesia adventista ha dicho que el cine está fuera de sus límites. Los argumentos han fluctuado desde amigos "desagradables" hasta un ambiente físicamente insalubre. Algunos inclusive han afirmado que si un cristiano va a un cine, su ángel guardián se quedaría en la puerta. La tecnología y los temas de salud han diluido estos argumentos. La televisión y los videos son comunes en nuestros hogares. Los cines tienen zonas en las cuales no se puede fumar y tienen aire acondicionado. Con estos cambios, )cómo responderemos nosotros como hijos de Dios? Lee cuidadosamente el Salmo 1:1 y el libro Mensajes para los jóvenes, página 396.
)Y qué diremos acerca de la televisión? )Y los videos? La mayoría de nosotros, también tenemos eso en nuestros hogares. Y el contenido no es muy diferente de lo que podríamos ver en los cines. De hecho, con la disponibilidad de la televisión por cable y por satélite, podemos ver cualquier cosa que se ve en los cines y mucho, mucho más.
Como cristianos, es importante conocer cuales son los principios de Dios para nosotros. La Biblia no habla acerca de videos, televisión, o películas. Da instrucciones para aquello que lo hacemos parte de nuestras vidas. Pablo nos dio una pauta en Filipenses 4:8. Escribió: "Todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad".
El lugar donde tú miras algo es infinitamente menos importante que lo que estás viendo. La instrucción de Pablo es concentrarse en lo que es admirable, verdadero y puro. Si no vamos al cine pero traemos una película moralmente degenerada a nuestro hogar, no estamos comprendiendo el verdadero sentido de las palabras de Pablo. Usando el criterio de Pablo, examina el espectáculo o la película que deseas ver. )Qué valores se describen en ella? Si contemplamos espectáculos que están llenos de mentiras, fraudes, violencia y sexo premarital, )cómo podemos mantener nuestros ojos sobre lo que es verdadero y admirable?
Pablo dice que debemos pensar en las cosas que son dignas de alabanza y verdaderas. Es necesario que nos preguntemos cuál es el mensaje de la película. Hay muy poco material producido para nuestro entretenimiento que no tenga un mensaje de alguna clase. Puede ser un mensaje muy indefinido, pero aun es un mensaje. Cada escena está emitiendo un mensaje. El diálogo emite un mensaje. Las acciones de los personajes y aun lo que visten y como se describe su estilo de vida, transmite un mensaje. Aun lo que no dicen, en algunos casos, transmite un mensaje.
Así que, cuál es el mensaje de la película o del espectáculo que estás viendo? Los personajes pueden no ser manifiestamente cristianos porque muy rara vez se representa a los cristianos en los medios de difusión. Cuando están en el reparto, a menudo se ríen en forma estereotipada. Pero, actúan los personajes en una forma semejante a la de Cristo? Tienen valores cristianos? Se mueve el argumento hacia una conclusión reflexiva y honesta? O se presentan situaciones que no responden a la realidad?
Las películas condensan asuntos en segmentos de una hora, una hora y media a dos horas. El resultado debe completarse cuando termina la película, cuando aparece la palabra "fin". La vida y las relaciones no funcionan en segmentos de 2 horas. Cuándo fue la última vez que hiciste frente a una crisis y la resolviste en un mero intervalo de 120 minutos? Al mirar retrospectivamente las acciones de los personajes también es necesario preguntarse si deseamos modelar nuestras vidas de acuerdo a ellos. El mensaje debe enseñar de que forma puedes contribuir a la sociedad que te rodea. Y, en última instancia, te debe hacer sentir más cerca de Dios.
Aun las películas "buenas" exigen vigilancia.
Recientemente, obligaron a Disney, una compañía largamente conocida por sus entretenimientos para la familia, a que recogiera 3 millones 400.000 videos de la película, Rescuers Down Under [Salvadores en las antípodas]. La razón para esa devolución? En el video estaba oculta una imagen explícitamente sexual. Es importante recordar que tú no siempre sabes que mensajes son los que está recogiendo tu mente. Esto se llama, programación subliminal. Deseas que alguien decida lo que entra en tu mente?
Refiriéndose a la advertencia de Pablo, debemos mirar lo que es puro y admirable. Muchas tramas en los espectáculos de la televisión y en las películas representan actividad sexual entre parejas que no están casadas. Al contemplar estos episodios, participamos en un acto que, de acuerdo a las normas bíblicas es fornicación o adulterio. Nuestras propias relaciones llegan a degradarse debido a nuestra aprobación silenciosa de esas escenas.
Un cristiano es responsable de sus acciones y de la forma cómo afectarán a otros. Si estás tratando de testificarle de Jesús a un amigo, la elección de lo que contemplas fortalecerá o debilitará tu testimonio. Hay herramientas que podemos usar para elegir sabiamente los espectáculos que contemplamos. En primer lugar, asegúrate que no estás desconectando la insinuación de Dios. Puede estar tratando de decirte que tus hábitos de ver necesitan ser reevaluados. 1 Tesalonicenses 5:19 nos recuerda, "no apaguéis el Espíritu". Necesitamos estar conscientes del Espíritu Santo pues ruega para que haya un cambio en nuestras vidas. No lo pasemos por alto.
En segundo lugar, averigua lo que los críticos dicen acerca de un espectáculo. Toma algún tiempo para examinar lo que dicen diferentes críticos. De nuevo, es necesario que te preguntes cuál es su perspectiva. Ten mucho cuidado no vaya a ser que eliges a un crítico que dice lo que tú quieres escuchar. Si es posible, busca lo que dice un crítico cristiano. Están allí y los encontrarás.
En tercer lugar, hay espacios o sitios en la red de Internet que anuncian reseñas críticas de películas. Varios de estos espacios se basan en valores cristianos y clasifican las películas de acuerdo a su contenido violento, su lenguaje y la conveniencia general para verlos. Dos lugares buenos en la red son: http://www.startext.net/homes/childcare/capreports/ y http://members.aol.com/MovieOnLn/MoviesOnline.htlm
Toma unos pocos minutos ahora para decidir cual será tu posición personal cuando veas televisión y películas. Básala en lo que Dios desea para tu vida. Esas normas deben incluir contemplar cosas que glorifican a Dios y que te ayudarán a ser una persona mejor.
Prepárate para hacer frente a la presión de grupo que te harán tus amigos. Si no pensaron, estudiaron y oraron para tener hábitos correctos para ver, probablemente no entenderán tu decisión. Sé paciente y explícales tan a menudo como sea necesario por qué has hecho esa decisión.
Encuentra alguna otra cosa para llenar las horas que hubieras pasado viendo televisión. Lee un buen libro tu solo o con otros miembros de la familia. Participa en un juego o haz una caminata. Descubre un nuevo pasatiempo. Actúa como voluntario en cualquier lugar. La vida no es sencillamente un deporte para espectadores. Recuerda, Dios prometió que nunca te dejará ni te desamparará (Josué 1:5). Tu ángel guardián no se quedará en la puerta del cine, sino que probablemente estará en algún otro lugar. )No estarás tú allí?
Preguntas para la discusión
1. Algunos adventistas piensan que está perfectamente bien ver una película en un cine siempre que el contenido sea apropiado. )Cuales son los asuntos/problemas reales involucrados en ir al cine? )Piensas que hay algunas razones por las que no deberíamos ir al cine aun si el contenido fuera bueno? Por otra parte, )está bien ver cualquier cosa que deseas con tal que no la veas en un cine público? )Puede estar en nuestros propios hogares la "silla de escarnecedores"?
2. Algunas personas dicen que no hay nada malo con ver una película que tiene sólo una escena mala o que tiene sólo unas pocas palabrotas o blasfemias, siempre que enseñe lecciones importantes. Qué es lo que piensas?
3. Cuáles son algunas pautas que debes usar para determinar si está bien que los cristianos vean o no una película? Trabaja con el grupo para desarrollar una lista.
4. Discutan y voten sobre lo que siente tu grupo que son sus programas favoritos de televisión. )Cómo se valoran esos espectáculos de acuerdo a las pautas que estableciste en respuesta a la pregunta 3?
5. Cuáles son algunas formas en las que los espectáculos y las películas que vemos influyen sobre nosotros?
6. Si miramos un video o espectáculo y sacamos placer de una escena en la que la gente está haciendo actos pecaminosos, nos tendrá Dios por responsables como si hubiéramos hecho nosotros esos actos? Cómo contempla Dios nuestra participación indirecta en el pecado?

EL INTERNET



El Internet y sus Hijos



Internet: el 83% de los chicos la usa sin control de los padres ENCUESTA A ADULTOS CON CHICOS DE 7 A 14 AÑOS



El 29% de los padres reconoce que no les preocupa qué hacen sus hijos en Internet. Sólo el 17% les prohibió navegar cuando no están en casa. Los chicos de clase media pasan 2,5 horas diarias en la Red. Un informe de la consultora de tecnología de la información, Prince & Cooke: Control de menores en el uso de Internet", realizada con base a una muestra de 264 padres de niños de 7 a 14 años del Area Metropolitana de Buenos Aires, en febrero de 2006, revela que el 83% de sus hijos accede a Internet sin el control de sus padres. En tanto, sólo el 7% necesita que uno de ellos le proporcione la clave de acceso para ingresar a la web. La misma fuente señaló que los chicos pasan frente a la PC un promedio de 2,5 horas. "Internet es sólo un medio de comunicación, no es el ´cuco´. Pero es importante conocer los hábitos de los hijos y elegir un lugar público para la PC", puntualizó Federico Cooke, vicepresidente de la firma. Al respecto el informe de P&C afirma que el 29% de los hogares tiene una computadora en la habitación infantil (hay 1,5 PC por hogar). Aunque el 57% de los hogares tiene la PC en el escritorio. Sólo el 20% en el living, y un 8% en el cuarto paterno. Todos estos datos se acompañan con las conclusiones obtenidas por la consultora de mercado Cazoll, a través de grupos focalizados que se hicieron con 100 madres y padres de niños de 6 a 12 años, y 50 chicos de entre 8 y 12 años, a principios de 2006. Todos de clase media. "Los padres tienen una visión ´beatificada´ de sus hijos. Sólo se menciona superficialmente el temor al ´tecnoautismo´, y en menor grado a la pornografía; pero se deja sin mención de sospecha la pedofilia o la exposición excesiva a publicidades maliciosas", advierten. En el mismo sentido el estudio de P&C destaca que para el 29% de los padres "no es una preocupación familiar lo que los menores de entre 7 y 14 años hagan con Internet desde el hogar". Otro 17% confesó que no tiene una idea definida sobre el tema. Y aunque el 35% de los padres asegura que advirtieron a sus hijos sobre los peligros de la Red, reconoce que no tienen una ´política formal´ sobre su uso. Apenas el 17% de los padres prohibió a sus hijos cibernavegar cuando no están en casa. Un adulto entrevistado por Cazoll, comentó al respecto: "Mis hijos tienen prohibido entrar a páginas raras y no entran, pero un compañerito de mi nene de 11 curiosea y borra el historial". Los límites bien puestos a los chicos funcionan bien. Los chicos entrevistados por Cazoll expresan que "no necesitan estratagemas para evadir la mirada de sus padres"; aunque reconocen que saben hacer desaparecer sus huellas por sitios "prohibidos". Dicen que conocen cómo: • Borrar el historial, archivos temporales, habilitar y deshabilitar niveles de seguridad de la configuración de la PC. • Borrar archivos guardados de las conversaciones por chat. • Producir un ´ardid´ de hackeo. Según Cazoll, los padres relajan el control sobre lo que sus hijos hacen en la web debido al "pacto de confianza" que hay entre ellos: "Mis hijos no tienen malos hábitos. Soy un padre, no un hacker", expresó otro adulto. Los chicos muchas veces participan activamente en Internet. Pero una cosa es que demuestren interés por algo más o menos parecido a lo que se ve en cualquier quiosco de diarios y otra, que un chico pueda gastar el dinero de sus padres sin su autorización. "Puse los datos de mi mamá y recibí el catálogo de música. Cuando llegó por correo lo recibí yo y mi mamá no se enteró", confesó un jovencito. Y aunque el informe de Cazoll dice "se detecta una calificación que coloca a los padres en un lugar ingenuo", los psicólogos explican que la "confianza que los padres depositan en sus hijos" y "las mentiras" que los chicos les dicen a sus padres —a quienes califican de "ingenuos"—, son actitudes propias y necesarias de los preadolescentes. "Los niños alrededor de los 8 y 12 años necesitan comprobar que sus padres no conocen sus pensamientos. Es importante la experiencia de poder engañar a los padres o maestros, e ir creando un espacio de privacidad", dice la psicoanalista Adriana Roa, docente de la cátedra I de Clínica de Adultos de la Universidad de Buenos Aires. La psicóloga y socióloga Claudia Messing coincide y dice: "Si el chico es capaz de contar lo que le pasa a sus padres porque confía en ellos, la TV e Internet no se apoderan de los chicos. El problema es cuando los hijos se desconectan de los padres". Es que cuando los chicos temen hablar con sus padres porque les tienen miedo, o porque hablan poco con ellos, la TV e Internet "pueden dañarlos porque no está funcionando el escudo protector que representan sus padres como referentes", dice Messing. Que los chicos transgredan sin poner en riesgo su integridad psíquica y física depende mucho de cuánto fluya la comunicación con sus padres. A mejor comunicación, más protegidos están. A menor comunicación, más expuestos están a los riesgos de Internet. Algo que no sólo vale para el mundo digital sino también para el mundo real.

TELEVISION Y VIOLENCIA (El plato de todos los dias)



Televisión y Violencia:

Una Respuesta Cristiana al Debate sobre sus Efectos



Por: Daniel Reynaud



Detrás del crimen creciente, incluyendo tiroteos en la escuela y en el lugar de trabajo, a menudo se hace la pregunta: La violencia en la televisión, ¿promueve o motiva la violencia en la vida real?
Generalmente, la creencia popular hace responsable a la televisión como una de las causas principales y directas de la violencia y algunas investigaciones parecieran confirmar esta idea. Aunque hay todavía una confusión considerable entre los investigadores acerca de los efectos de los medios de comunicación, no se ha modificado mayormente el punto de vista popular sobre el tema. La crítica popular a la televisión presenta un cuadro de adicción que anestesia a los televidentes transformándolos en autómatas pasivos y zombis hipnotizados. A menudo se culpa a la televisión por el escaso rendimiento académico de los niños en la escuela, a pesar del hecho de que las tasas de alfabetismo en el occidente nunca han sido más elevadas. El problema es que aunque el alfabetismo ha aumentado, las exigencias con respecto a saber leer y escribir ha aumentado aún más rápido. La investigación también ha disipado el temor de que la televisión neutraliza la creatividad; los niños juegan tan creativamente con los relatos de la televisión como con los que leían en los libros.
Irónicamente, los críticos populares a menudo arguyen que la televisión no sólo ha transformado a los niños en zombis pasivos, sino que los ha llevado a ser hiperactivos, con un período de atención muy breve y con poderosas inclinaciones hacia la violencia. Pero nunca se explica cómo es posible que la televisión pueda hacer ambas cosas al mismo tiempo. Exactamente, ¿cómo es un zombi hiperactivo? Detrás de la creencia popular yace una suposición de que los individuos imitan actos específicos de violencia que ven en la televisión. De allí los reclamos periódicos a controlar más el contenido de la televisión, en particular el horario en que los niños la miran. Es típico pensar que siempre son los otros los que sufren lo pernicioso de la televisión, y nunca nosotros mismos.1 Pero es interesante notar que los niños tienen el mismo pensamiento paternalista y piensan que los programas no les hacen daño a ellos sino que son perjudiciales para los otros niños.
La investigación conductista
Se necesita una investigación sólida para aclarar perspectivas tan contradictorias. Pero la calidad de los estudios acerca de la televisión ha sido a menudo muy variada, y los resultados por lo general han estado de acuerdo con las opiniones de los investigadores anteriores a ellos. La mayoría de los aproximadamente 10.000 estudios realizados acerca de la violencia en la televisión ha sido realizada dentro del marco de la teoría conductista. Tal vez los experimentos mejor conocidos son los de Bandura y sus asociados, que demostraron que los niños que miran televisión sufren un efecto directo y medible sobre su conducta hacia unos grandes muñecos Tentempié (o dominguillos) de peluche. Los niños que habían visto una película violenta con estos muñecos se comportaron en forma mucho más agresiva que los que no habían visto la película.2
Sin embargo, aunque muchos experimentos conductistas mostraron una aparente conexión entre el mirar y la conducta, hay dudas considerables en cuanto a la validez de las conclusiones cuando se las generaliza. La investigación conductista tendía a ignorar el hecho de que mirar en una circunstancia controlada artificialmente afectaba la percepción de los televidentes y las expectativas acerca de sus reacciones. Uno de los investigadores oyó que un niño, en uno de los experimentos de Bandura, comentó: «Mira, mamá, allí está el muñeco a quien tenemos que pegarle».3
Tal reacción no sorprende. Un niño, en un ambiente que no le era familiar, llegó a la conclusión natural de que la película estaba sirviendo de modelo para su conducta hacia muñecos idénticos a los que se le estaban mostrando. La opinión actual es que la violencia mostrada hacia los Tentempié fue, por lo menos, tanto producto de las expectativas de los experimentadores que los niños percibían como el resultado de la violencia que estaban mirando. Además, suponer que un niño en esta situación transferiría esa conducta hacia las personas, es una falacia. Demandaría que el niño dejara de reconocer la diferencia entre una conducta aceptable hacia el muñeco y hacia personas reales. De hecho, los niños comprenden la modalidad de la televisión desde una edad razonablemente temprana y distinguen en formas más bien complejas entre lo que es real y lo que no es real. Los estudios acerca de la audiencia muestran que los televidentes no adoptan automáticamente los valores que ven en un programa; más bien, generalmente resisten los valores presentados en la televisión que contradicen abiertamente sus propios valores.4 Otros experimentos conductistas mostraron que las condiciones artificiales condujeron a resultados artificiales.5 En resumen, la investigación conductista con demasiada frecuencia, no ha tomado en cuenta las diversas formas en que la audiencia interpreta la televisión.
El problema de los investigadores y el público general es que es más probable que se llegue a una conclusión acerca de la violencia en la televisión si ésta apoya nuestras ideas preconcebidas. A fin de llegar a conclusiones inteligentes acerca de los efectos de mirar televisión debemos reconocer primero nuestros propios prejuicios y esperar que estos puedan ser modificados, sacudidos o contradichos.
Investigación múltiple
Las investigaciones que combinan las metodologías de diversas disciplinas están proporcionando las conclusiones más útiles acerca de los efectos de la violencia en la televisión. Lo que se está descubriendo es complejo, y sin embargo está más de acuerdo con el sentido común que las conclusiones previas. La lógica argumentaría que si las conclusiones de los conductistas fueran correctas acerca de los efectos inmediatos y mensurables de mirar una televisión violenta, entonces la mayor parte de las sociedades occidentales estaría llena de personas violentas. Aunque la violencia es uno de los grandes problemas de las sociedades occidentales, no alcanza un clímax después de los episodios de presentaciones violentas, ni la mayoría de los televidentes serían considerados violentos, en general.
De cualquier manera, las representaciones de violencia en la televisión no siguen los modelos reales de la vida diaria. Por ejemplo, con frecuencia se presenta a los policías con sus armas desenfundadas, mientras que una encuesta hecha a los oficiales de policía de los Estados Unidos reveló que, mientras cumplían con su deber, dispararon sus armas, como promedio, una vez cada 27 años.6 La mayoría de la violencia real es mucho menos espectacular y generalmente más personal que la que se muestra típicamente en la televisión.
Otra complicación es el problema que surge al tratar con la naturaleza y el grado de violencia. Aunque todos están de acuerdo en que el homicidio a sangre fría con un caño de hierro es violento, las mujeres probablemente estarían dispuestas a evaluar una confrontación verbal como violenta, mientras los hombres, más probablemente, limitarían su definición al uso de la fuerza física. En esencia, la violencia es un acto que se define socialmente, no puramente desde el punto de vista de la conducta.7 Por ejemplo, el hacerle un corte a un extraño con un instrumento podría ser considerado como violencia, a menos que la «víctima» fuera un paciente, y el «agresor» un cirujano con un escalpelo. Pero si el cirujano fuera un nazi haciendo experimentos en un campo de concentración, nuestro concepto podría cambiar otra vez. En cada caso la conducta fue la misma. Cambiar sólo el contexto social hizo la diferencia en la interpretación. Los deportes como el fútbol americano y el boxeo, en forma rutinaria, valoran una conducta violenta que sería inaceptable en la calle. Aun la violencia de un policía hacia un criminal es interpretada generalmente como menos violenta que la misma acción realizada por un criminal hacia un policía.
La naturaleza compleja de la violencia
La naturaleza compleja al definir la violencia se refleja en la forma en que las audiencias interpretan la violencia. Los niños interpretan la televisión de acuerdo con su propio sentido de justicia y orden sociales. Son capaces de leer la televisión como una serie de códigos, más bien que una representación literal de la realidad. Los estudios muestran que con frecuencia los niños son conscientes de la naturaleza representada en los espectáculos de la televisión y pueden señalar su naturaleza artificial. Pueden resistir y aún oponerse al mensaje de la televisión, porque reconocen la diferencia entre una representación y la realidad. Por ejemplo, los niños aborígenes en Australia se alinearon a veces con los indios «malos» en contra de los héroes en las películas del oeste, porque empatizan con la opresión social que sufren ellos.8
La forma en que se presenta la violencia afecta significativamente el grado de este impacto. Los niños interpretan ciertos códigos en la televisión como pura fantasía y los elementos violentos o de otra índole no son tomados literalmente. Esto es particularmente cierto en los dibujos animados, que contienen más actos de violencia por minuto que cualquier otra forma de televisión, pero también se aplica a los espectáculos con representaciones tales como la lucha, donde la causa y el efecto son obviamente exagerados. Los niños saben que la violencia es una representación exagerada de un conflicto, que en sí mismo es un elemento irremplazable de cualquier forma dramática, sea drama, espectáculos de preguntas y respuestas, o los deportes. Otros códigos son leídos en forma más literal. Un drama realista puede ejercer un fuerte impacto sobre los televidentes, especialmente en los más jóvenes, porque los códigos se parecen mucho a sus percepciones de la realidad. Aún entonces, cuando los niños crecen, son capaces de distinguir entre los actores que desempeñan sus papeles y los eventos que ellos describen. Tal vez las exhibiciones que tienen mayor impacto son la violencia documentada, como la que se ve en los noticiosos, los documentales, y los espectáculos realistas de la televisión, porque los niños saben que eso es real.9
La ideología social también afecta la interpretación de la violencia. Mientras las escenas violentas son comunes en la televisión, la violencia generalmente no es condonada en la sociedad y generalmente es canalizada hacia formas altamente reglamentadas como en ciertos deportes. Esta estructura ideológica influye sobe la forma en que los niños comprenden la violencia que ven en la televisión y los hace menos susceptibles a ella que, digamos, los estereotipos racistas o sexistas, que a menudo son apoyados por las estructuras sociales e ideológicas en que viven los niños. La familia, la escuela, la iglesia, y en general, las circunstancias en que vive un niño tendrán un papel importante en la determinación de los efectos de la televisión sobre ese niño.10
Debemos reconocer que la televisión no es la causa de la violencia social en los niños o en ninguna otra persona. En realidad, la vida es mucho más compleja que eso. Las sociedades violentas existieron antes de la televisión, y muchas de ellas fueron más violentas que la sociedad occidental actual. La conducta violenta es el producto de condiciones personales, sociales y económicas, y no será resuelta sencillamente prohibiendo el televisor. Por muchos años el Japón ha tenido niveles significativamente menores de violencia que los Estados Unidos. Pero la televisión japonesa es considerada generalmente como más violenta. La diferencia deberá ser explorada en las culturas de cada nación más bien que mediante un análisis de los medios masivos violentos.
También debemos preguntarnos hasta qué punto las sociedades urbanas despersonalizan a los individuos. Un estilo de vida urbano tiende a forzar a las personas a ignorar a los que los rodean en el ómnibus, el tren, la calle y el ascensor, aun cuando se estén tocando. ¿Qué influencia es mayor: la de los códigos de los dramas ficticios de la televisión o el impacto diario de la vida real que produce el no prestar atención a los demás?
Esto no significa que la violencia no tiene ningún efecto, o que no importa qué se muestra en la televisión, o que los niños pueden mirar cualquier cosa. Una exposición prolongada a otras formas de violencia en los medios, incluyendo las películas y los videojuegos, puede también tener un efecto perjudicial. El sentido común nos dice que no podemos mirar tanta televisión sin que produzca algún efecto, porque, como 2 Corintios 3:18 nos recuerda, por la contemplación somos transformados.
La televisión: una fuerza formadora
La televisión actúa como una poderosa fuerza formadora por derecho propio y afecta a los niños. En particular, la televisión puede tener efectos poderosos sobre los niños menores de siete años. En los primeros años, los niños reaccionan a las imágenes de la televisión exactamente como lo hacen con las personas reales y no comprenden que una cosa es la imagen y otra es la realidad. Los niños muy pequeños necesitan ser protegidos de representaciones de violencia. A los niños pequeños les resulta difícil comprender cómo los padres pueden aclamar un «tacle» en el fútbol americano y al mismo tiempo castigarlos por hacer lo mismo con sus hermanos. Desafortunadamente, aun muchos programas para niños tienen niveles de conflicto demasiado intensos para los niños pequeños, quienes pueden ser afectados por un acto de violencia tan suave como una discusión. Para los niños preescolares, se recomienda la programación más benigna.
Los niños también desarrollan la discriminación a tasas diferentes, y los padres necesitan observar a sus hijos en forma individual, evaluando sus etapas de desarrollo. La mayoría de los padres son demasiado optimistas con respecto a la capacidad de sus niños de manejarse con la violencia, a menudo por razones egoístas ocultas. Evitar que el niño vea algo violento podría forzar a los adultos a no mirar televisión.
Puede ser difícil aceptar que tal vez la violencia en la televisión no es tan devastadora como la evaluación popular nos quiere hacer creer. Surge la pregunta: Si la televisión no tiene tanta influencia, ¿cómo es que se gastan miles de millones de dólares por año para apropiarse de sus poderes de persuasión? La respuesta se encuentra otra vez en el proceso de mirar la televisión. Es más efectiva cuando le dice a la gente lo que ésta ya cree, y la publicidad refuerza la conducta socialmente aceptable, y en realidad, la que es socialmente recompensada. Sin embargo, la violencia en la televisión tiene un impacto reducido sobre la conducta de las personas. Porque cuando vivimos en una sociedad que en general no condena la violencia, aprendemos que la violencia en la pantalla es un código mediante el cual se cuentan historias, pero no un código con el cual uno se conduce en la vida real. La excepción sería, por supuesto, los niños que crecen en un hogar violento. Ellos aprenden que la violencia es una manera efectiva para que el más fuerte consiga lo que quiere. En tales casos, la televisión confirma sus creencias. Pero debemos reconocer que su conducta violenta fue aprendida en el hogar y su ambiente social y meramente reforzada por la pantalla. A menudo son estas personas las que proporcionan la evidencia popularizada en los medios de que la televisión provoca la violencia. Algunos hasta testifican que fue una película o un programa específico los que los condujeron a crímenes determinados. Tenemos que examinar cuidadosamente tales afirmaciones en busca de otros factores que hayan producido la violencia. Porque mientras la televisión puede contribuir a la conducta de las personas violentas, argumentar que es la causa de ella, es dejar de comprender la influencia de la experiencia de la vida real en la formación de las actitudes hacia la violencia. También debemos recordar el concepto cristiano de la elección, ya que aun Adán y Eva en un ambiente perfecto hicieron una mala decisión. Es tan fácil echarle la culpa a la televisión por elecciones que, en última instancia, son responsabilidad nuestra.
El hecho de que los mismos medios promueven un concepto de que ellos son la causa de los crímenes parece ser un argumento poderoso que apoya el impacto de la violencia en la televisión, pero en realidad los medios tienen interés en promover este concepto. Irónicamente, al echarse la culpa a sí mismos, los medios protegen sus ganancias. Los medios nunca llegarían a nada si contradijeran las creencias populares. Además, si los medios señalaran las causas reales de la violencia, eso distraería a las personas de la publicidad que las anima a gastar más en favor de ellas. La forma más efectiva de reducir el crimen no es mediante sentencias más drásticas, más policías, y la eliminación de los programas violentos, sino mediante la promoción de relaciones efectivas entre las personas. Si más personas estuvieran comprometidas con la acción social cristiana, ayudando a los desempleados a encontrar un trabajo significativo, creando actividades valiosas para los grupos más desposeídos, gastando sus propios excedentes en aquellos menos privilegiados que en ellos mismos, en el contexto de compartir el amor de Cristo, el crimen disminuiría significativamente. Pero esta conducta interferiría con la meta de la televisión de que gastemos más dinero en nosotros mismos.
La solución para la violencia
Los cristianos reconocen específicamente que la violencia es un producto de nuestra naturaleza pecaminosa, y no puede ser curada sencillamente proscribiendo influencias externas tales como las películas. Aun la acción social sólo podría reducir el crimen, pero no erradicarlo. Pero la solución real del crimen, que es el cambio del corazón que produce el evangelio de Jesús, es impopular. Es más fácil echar la culpa a los medios de comunicación que aceptar la responsabilidad personal. Desde el punto de vista cristiano, tal vez la violencia en la televisión es el menor de los males de ella, sencillamente por la razón de que la mayoría comprende que es una conducta socialmente inaceptable. Corremos un riesgo mayor cuando estamos de acuerdo con los medios, porque la televisión tiene más poder al coincidir con nuestros valores, y entonces, con frecuencia, no somos conscientes de su influencia. La relativa ausencia de protestas de parte de los cristianos acerca del materialismo, del culto a la belleza y del racismo y sexismo de los medios sugiere que tal vez estos valores forman parte de nuestras actitudes y la televisión sólo las refuerza. La religión de Jesús estaba profundamente opuesta a la discriminación sobre la base del sexo, la raza, la edad, la apariencia o la riqueza, y se debería mantener esta oposición. Hasta cierto punto, el debate sobre la violencia es una pantalla de humo que esconde el verdadero daño que causa la televisión al confirmar nuestros prejuicios, al mismo tiempo que nos hace sentir bien porque condenamos un mal menor.

domingo, 28 de septiembre de 2008

MAS FOTOS- (Bautismo 27-09-08)







bautismos fotos -2 (27-09-08)
















BAUTISMO (FOTOS)











El bautisterio para los nuevos nacimientos

cinco bautismos en la Iglesia Los Hornos



Cinco nuevos nacimientos en Cristo Jesus, el bautismo estuvo a cargo del Pastor Justed, perteneciente a Florida, hubo ademas sorpresas que solo Dios podia llevar a cabo fueron cinco quienes tambien recieron el llamado que estuvo a cargo de Maximiliano un estudiante de Teologia de la UAP, y entre aquellos que aceptaron se encontraba su madre fueron momentos de emocion y gozo vividos el dia sabado 27 de septiembre.

viernes, 26 de septiembre de 2008

SABADO O DOMINGO?





¿Sábado o domingo?

Jaime Carrizales

Resumen:

La palabra domingo no se encuentra en la Biblia, pero hay en el Nuevo Testamento ocho versículos que mencionan "el primer día", es decir, el domingo. Los Adventistas del Séptimo día guardamos el Sábado bíblico, instituido en la creación del planeta, cuando no existían diferencias en razas. El Sábado es un regalo de Dios al mundo entero.
El Domingo en el Nuevo TestamentoLa palabra domingo no se encuentra en la Biblia, pero hay en el Nuevo Testamento ocho versículos que mencionan "el primer día", es decir, el domingo.
Examinémoslos brevemente. 1.- Pasado el sábado, al amanecer el primer día de la semana, vinieron María Magdalena, y la otra María, a ver el sepulcro (San Mateo 28:1). En este texto no se habla de la santidad del domingo, ni se hace mención de culto alguno. El versículo dice solamente que en la madrugada del primer día de la semana las mujeres fueron a la tumba. 2.- Y como pasó el sábado, María Magdalena, y María madre de Jacobo, y Salom, compraron drogas aromáticas, para venir a ungirle. Y muy de mañana, el primer día de la semana, vinieron al sepulcro, ya salido el sol (San Marcos 16:1, 2). Estos pasajes nos indican ante todo que el primer día de la semana sigue al sábado, y además, que aquellas mujeres fueron al sepulcro para embalsamar el cuerpo del Señor, es decir, para trabajar, lo que no hubieran hecho si el domingo hubiera sido sagrado. 3.- Mas como Jesús resucitó por la mañana, el primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdalena, de la cual había echado siete demonios (San Marcos 16:9). En este versículo tampoco se menciona un día de reposo. Sin duda alguna, si nuestro Señor hubiese deseado que el día de la resurrección fuera observado como día de reposo, lo habría dicho a sus discípulos cosa que no hizo. 4.- Y el primer día de la semana, muy de mañana, vinieron al sepulcro, trayendo las drogas aromáticas que habían aparejado, y algunas otras mujeres con ellas (San Lucas 24:1). San Lucas concuerda con los otros evangelistas acerca de las intenciones que animaban a las mujeres que fueron a la tumba: iban a trabajar.5.- Y el primer día de la semana, María Magdalena vino de mañana, siendo aun oscuro, al sepulcro; y vio la piedra quitada del sepulcro (San Juan 20:1). Este pasaje fue escrito como sesenta años después de la resurrección de Cristo. Sin embargo, no hay en él indicio alguno de que se hubiese producido un cambio en el día de reposo. El discípulo que había vivido tan cerca del Señor no parece haber oído hablar de una conmemoración de la resurrección. 6.- Y como fue tarde aquel día, el primero de la semana, y estando las puertas cerradas donde los discípulos estaban juntos por miedo a los judíos, vino Jesús y púsose en medio, y díjoles: ¡Paz a vosotros! (San Juan 20:19). El versículo indica claramente que los discípulos se habían reunido, no para celebrar un culto, sino por miedo de los judíos. En San Marcos 16:14 vimos que el Señor los censuró por tardar en creer que había resucitado. No estaban allí, pues, con el propósito de conmemorar la resurrección. 7.- Y el primer día de la semana, juntos los discípulos a partir el pan, Pablo les enseñaba, habiendo de partir al día siguiente: y alargó el discurso hasta la medianoche. Después subiendo, y partiendo el pan, y gustando, habló largamente hasta el alba, y así partió. Y nosotros subiendo en el navío, navegamos a Assón, para recibir de allí a Pablo; pues así había determinado que debía él ir por tierra (Hechos 20:7, 11, 13). El apóstol San Pablo estaba en viaje hacia Jerusalén. Su barco hizo escala en Troas, y allí reunió a sus conversos. Predicó hasta después de medianoche y celebró con ellos el servicio de la Comunión. Este hecho no convierte el primer día de la semana en día de reposo; con este criterio, tendríamos que deducir que el miércoles es el día de reposo porque el miércoles siguiente el mismo apóstol, encontrándose en Mileto, celebró allí también una reunión. (Véase Hechos 20:14-18). Nuestro Señor instituyó la comunión el jueves de noche. Si la Cena santifica un día, ¿por qué no observamos el jueves como día de reposo? Además, la Cena no está relacionada con la resurrección de Cristo sino que anuncia su muerte. En Hechos 2:46 leemos que los discípulos partían el pan todos los días. Pero ello no transformaba en días de reposo todos esos días. Recordemos, apreciado amigo, que cada una de las instituciones contenidas en la nueva alianza fue establecida antes de la muerte de Cristo. Nada se añadió después de la resurrección. Sus últimas enseñanzas y su testamento fueron sellados con su sangre. Nunca hizo él mención de la observancia del primer día de la semana en conmemoración de la resurrección. 8.- Cada primer día de la semana cada uno de vosotros aparte en su casa, guardando lo que por la bondad de Dios pudiere; para que cuando yo llegare, no se hagan entonces colectas (1 Corintios 16:2). Las iglesias fundadas por San Pablo querían participar de una colecta en favor de los pobres de Jerusalén, y se dieron a los corintios instrucciones al respecto. El primer día de la semana, después de reposar el sábado, cada uno debía poner aparte, en su casa, aquello de que pudiese disponer. El apóstol escribió esa epístola hacia el año 59 de nuestra era, y sin embargo, no hay en sus palabras ningún indicio de que el primer día de la semana fuese un día sagrado.
¿Cómo deben conmemorar entonces los cristianos la resurrección de Cristo? Respuesta: La conmemoración de un gran acontecimiento no se hace una vez por semana. No hay mayores motivos para observar el domingo en memoria de la resurrección de Cristo de los que hay para observar el viernes, día de su muerte, o el jueves, día de su ascensión. Nuestro Señor mismo instituyó la Cena para recordar su muerte. Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que venga (1 Corintios 11:26). El apóstol San Pablo aclara que el bautismo es en la vida del cristiano el símbolo de la resurrección de Cristo. ¿O no sabéis que todos los que somos bautizados en Cristo Jesús, somos bautizados en su muerte? Porque somos sepultados juntamente con él a muerte por el bautismo; para que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida. Porque si fuimos plantados juntamente en él a la semejanza de su muerte, así también lo seremos a la de su resurrección (Romanos 6:3-5). ¿No clavó nuestro Señor el sábado en la cruz? Respuesta: San Pablo nos dice qué es lo que fue clavado en la cruz: Rayendo la cédula de los ritos que nos era contraria, que era contra nosotros, quitándola de en medio y clavándola en la cruz. Por tanto, nadie os juzgue en comida, o en bebida, o en parte de día de fiesta, o de nueva luna, o de sábados. Lo cual es la sombra de lo por venir; mas el cuerpo es de Cristo (Colosenses 2:14, 16, 17). Fueron las leyes ceremoniales que prefiguraban a Cristo, el Cordero de Dios sacrificado en la cruz por causa de nuestros pecados, lo que se clavó en la cruz. Allí la realidad se unió a la sombra; el símbolo fue reemplazado por el objeto al cual señalaba. Por esto el apóstol podía escribir que sólo eran "sombra de lo por venir". Los sábados mencionados en este texto son ciertas fiestas judías que también prefiguraban cosas venideras. Recuérdese que la palabra "sábado" significa "reposo". Si estudiamos las leyes ceremoniales del antiguo Israel descubriremos que esos "sábados" mencionados por San Pablo eran fiestas anuales (1er. Iibro de las Crónicas 23:31), no semanales. Las "nuevas lunas" eran fiestas mensuales. Entre esos "sábados" ceremoniales se hallaban el del día de la expiación y el de la fiesta de los tabernáculos. El sábado semanal, a diferencia de los sábados ceremoniales, está asentado sobre un fundamento permanente, porque fue instituido en el Eden para conmemorar la Creación. Los preceptos ceremoniales, aun cuando instituidos por Dios, eran de carácter temporario y sólo debían estar en vigencia mientras señalaban al Mesías venidero. Tal es el caso de los sábados ceremoniales. En cambio un precepto moral es de carácter permanente porque está relacionado con la naturaleza moral del hombre que es siempre la misma. Tal es el caso del sábado del cuarto mandamiento. ¿No dice San Pablo que todos los días tienen el mismo valor? Respuesta: Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté asegurado en su ánimo (Romanos 14:5). A los judíos conversos de la iglesia primitiva les costaba abandonar las ceremonias que solían observar antes. Consideraban el cristianismo como una religión judía. Nuestro Señor era judío; los discípulos eran judíos; las Escrituras habían sido escritas en hebreo. Era difícil separar los símbolos de la realidad concreta, redentora, es decir, de la obra de Cristo. En el capítulo 14 de Romanos, San Pablo exhorta a esos cristianos de origen judío a que no continúen disputando acerca de aquellos ritos que habían terminado en la cruz. Los "días" a que se refiere son, entonces, los que correspondían a las fiestas judías y no al sábado del cuarto mandamiento. El reposo del sábado, ¿no estaba destinado solamente a los judíos? ¿Por qué hemos de observarlo nosotros, que no somos de raza judía? Respuesta: El sábado por causa del hombre es hecho; no el hombre por causa del sábado. (San Marcos 2:27). El sábado fue instituido en la creación. Los judíos no existían entonces. Dios hizo el sábado para el hombre, es decir para la humanidad entera. Cuando los mandamientos fueron proclamados en el monte Sinaí, en presencia de todo Israel, le fue dicho a éste que se acordara de que Dios se lo había dado a la familia humana centenares de años antes. El mandamiento no se aplicaba sólo a los judíos, sino también "al extranjero que está dentro de tus puertas". Aun los gentiles (que eran extranjeros para los judíos) debían observar el sábado. Si el sábado --cuarto mandamiento-- se hubiese constituido para los judíos solamente, entonces los Diez Mandamientos como conjunto, también hubieran sido sólo para ellos. En tal caso, los cristianos podrían tomar el nombre de Dios en vano, postrarse ante ídolos, robar, fornicar, mentir. Como por lógica esto no puede ser, tampoco podemos decir que es lícito violar el sábado. ¿Insiste Dios en que el séptimo es el único día que los cristianos deben observar? Respuesta: Porque de cierto os digo, que hasta que perezca el cielo y la tierra, que ni una jota ni un tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas. De manera que cualquiera que infringiere uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñare a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos: mas cualquiera que hiciere y enseñare, éste será llamado grande en el reino de los cielos (San Mateo 5:18, 19). Cualquiera que hubiere guardado toda la ley, y ofendiere en un punto, es culpado de todos (Santiago 2:10). Si la ley de Dios pudiera haber sido abrogada, Cristo no habría necesitado morir para salvar al mundo. El murió para abolir el pecado y confirmar la ley de Dios eternamente. ¿No quiere usted entregar su vida en las manos de Dios? ¿Quiere usted, apelando al poder de su Salvador resucitado, cumplir toda su voluntad, observar sus mandamientos, inclusive el que se refiere a la observancia del sábado? Hechos Bíblicos sobre el Sábado¿Por qué observamos el Sábado? ¿Qué propósito tiene? ¿Quién lo creó? ¿Cuándo? ¿Qué día es el verdadero Sábado? Muchos guardan el primer día de la semana o domingo. ¿Qué autoridad bíblica tienen para hacerlo? Sólo unos pocos guardan el séptimo día, o sea el Sábado. ¿Qué dice la Escritura al respecto? Aquí están los hechos acerca de ambos días, tal como los expresa la Palabra de Dios. I.- Sesenta Hechos Bíblicos con Respecto al Séptimo Día.-1.- Después de trabajar seis días en la creación de la tierra, el gran Dios descansó el séptimo día (Gén. 2:1-3).2.- Este hecho señala a ese día como el día de reposo de Dios, o día Sábado, que significa día de descanso. Ilustrémoslo: cuando una persona nace en un determinado día, esa fecha será su cumpleaños, o su día de nacimiento u onomástico. De modo que cuando Dios descansó en el séptimo día, ese día llegó a ser su reposo, o sábado.3.- Por lo tanto, el séptimo día debe ser siempre el día Sábado de Dios. ¿Puede usted cambiar su día de nacimiento por otro día? No. Tampoco puede cambiar el día de reposo por uno en el cual Dios no reposó. De aquí que el séptimo día es todavía el Sábado de Dios.4.- El Creador bendijo el séptimo día (Gén. 2:3).5.- Dios santificó el séptimo día (Exo. 20:11).6.- Creó el día Sábado en el huerto del Edén (Gén. 2:1-3).7.- Fue hecho antes de la caída; por lo tanto, no es un tipo; porque los tipos no fueron introducidos sino hasta después de la caída.8.- Jesús dijo que el Sábado fue hecho por causa del hombre (Mar. 2:27); es decir, para la raza humana; por lo tanto, están llamados a observarlo tanto los gentiles como los judíos.9.- Es un memorial de la creación (Exo. 20:11; 31:17). Siempre que reposamos el séptimo día, como lo hizo Dios después de la creación, conmemoramos ese gran evento.10.- Fue dado a Adán, padre de la raza humana (Mar. 2:27; Gén. 2:1-3).11.- Y por lo tanto, a través de él, a todas las naciones (Hechos 17:26).12.- No es una institución judía, porque fue establecido unos 2.300 años antes que existiera un solo judío.13.- La Biblia nunca lo llama el Sábado judío, sino siempre "el Sábado del Señor tu Dios". Los seres humanos debemos tener mucho cuidado de no estigmatizar el día santo de reposo de Dios.14.- Se hace referencia al Sábado en forma destacada en todo el periodo patriarcal (Gén. 2:1-3; 8:10; 12:29; 27, 28, etc.).15.- Era parte de la ley de Dios antes del Sinaí (Exo. 16:4, 27-29).16.- Luego Dios lo colocó en el mismo corazón de su ley moral (Exo. 20:3-17). ¿Por qué lo colocó allí si no era como los otros nueve preceptos, que todos admiten que son inmutables?17.- El séptimo día, o Sábado, fue ordenado por la voz del Dios viviente (Deut. 4:12-13).18.- Luego Dios escribió el mandamiento con su propio dedo (Exo. 31:18).19.- Lo grabó en piedra para simbolizar su perpetuidad (Deut. 5:22).20.- Fue reverentemente preservado en el arca sagrada en el Lugar Santísimo (Deut. 10:1-5).21.- Dios prohibió toda actividad secular en el día Sábado, incluso en los tiempos más apremiantes (Exo. 34:21).22.- Dios destruyó a los israelitas en el desierto porque profanaron su santo Sábado Eze. 20:12-13).23.- Es señal del verdadero Dios, por lo cual, hemos de distinguirlo de los falsos dioses (Eze. 20:20).24.- Dios prometió que Jerusalén permanecería para siempre si los judíos guardaban el Sábado (Jer. 17:24-25).25.- Los envió al cautiverio babilónico por violarlo ((Neh. 13:18).26.- Dios destruyó a Jerusalén por violar el Sábado (Jer. 17:27).27.- Dios ha pronunciado una bendición especial sobre todos los gentiles que lo guarden (Isa. 56:6-7).28.- Esta bendición se encuentra en la profecía que se refiere totalmente a la dispensación cristiana (Isa. 56).29.- Dios ha prometido bendecir a cualquier persona que guarde el Sábado (Isa. 56:2).30.- El Señor desea que llamemos al Sábado "delicia", "santo", "glorioso de Jehová" (Isa. 58:13). Cuídese de no llamarlo "el antiguo Sábado judío" o "un yugo de servidumbre", etc.31.- Tras haber sido pisoteado durante "muchas generaciones", el santo Sábado ha de ser finalmente restaurado en los últimos días (Isa. 58:12-13).32.- Todos los santos profetas guardaron el séptimo día o Sábado.33.- Cuando el Hijo del hombre estuvo en esta tierra, guardó el séptimo día o Sábado durante toda su vida (Luc. 4:16; Juan 15:10). De este modo, siguió el ejemplo de Su Padre en la creación. ¿No es decididamente confiable para nosotros seguir el ejemplo tanto del Padre como del Hijo?34.- El séptimo día es el día del Señor (Apoc. 1:10; Mar. 2:28; Isa. 58:13; Exo. 20:10).35.- Jesús fue el Señor del Sábado (Mar. 2:28); es decir, lo amó y preservó, como el esposo es señor de la esposa y la ama y protege (1 Pedro 3:6).36.- El vindicó el Sábado en su misericordia como una institución diseñada para beneficio del hombre (Mar. 2:23-28).37.- En vez de abolirlo, Jesús enseñó cuidadosamente cómo debía guardarse el Sábado (Mat. 12:1-13).38.- Enseñó a sus discípulos a no hacer nada en el Sábado, que no fuera "legal" (Mat. 12:12).39.- Jesús instruyó a sus apóstoles en el sentido de que el Sábado sería guardado cuidadosamente y con oración 40 años después de Su resurrección (Mat. 24:20).40.- Las santas mujeres que habían estado con Jesús guardaron reverentemente el Sábado después de Su muerte (Luc. 23:56).41.- Treinta años después de la resurrección de Jesús el Espíritu Santo lo llamó expresamente "día de reposo" (Hechos 13:14).42.- Pablo, el apóstol de los gentiles, lo llamó "día de reposo" el año 45 d.C. (Hechos 13:27). ¿Lo ignoraba Pablo? ¿O creeremos a los maestros modernos que afirman que había dejado de ser el Sábado después de la resurrección de Cristo? 43.- Lucas, el inspirado historiador cristiano que escribe en el año 62 d.C., lo llama "día de reposo" (Hechos 13:44).44.- Los gentiles convertidos lo llamaron el Sábado (Hechos 13:42).45.- En el gran Concilio Cristiano, celebrado el año 52 d.C., en presencia de los apóstoles y de miles de discípulos, Santiago lo llama "día de reposo" (Hechos 15:21).46.- Era costumbre tener reuniones de oración en ese día (Hechos 16:13).47.- Pablo leyó públicamente las Escrituras en ese día (Hechos 17:2-3).48.- Pablo acostumbraba predicar en ese día (Hechos 17:2).49.- El libro de Hechos registra 84 reuniones celebradas en ese día (Hechos 13:14, 44; 16:13; 17:2; 18:4).50.- Nunca hubo ninguna disputa entre los cristianos y los judíos con respecto al día Sábado. Ello es una prueba de que los cristianos observaban unánimemente el mismo día que los judíos.51.- En todas las acusaciones que se presentaban contra Pablo, ninguna era porque violara el Sábado. ¿Por qué no lo hicieron si él hubiese sido un trasgresor?52.- Pablo mismo declaró expresamente que él había guardado la ley: "Ni contra la ley de los judíos, ni contra el templo, ni contra César he pecado en nada" (Hechos 25:8). ¿Cómo podría haber sido cierto esto si no hubiera guardado el Sábado?53.- En el Nuevo Testamento el Sábado se menciona 59 veces, y siempre con respeto, dándole el mismo título que llevaba en el Antiguo Testamento: "el día de Sábado".54.- No se dice nada en el Nuevo Testamento de que el Sábado haya sido abolido, hecho a un lado, cambiado o algo por el estilo.55.- Dios nunca ha dado permiso a ningún hombre para que trabaje en ese día. Amigo, ¿con qué autoridad utiliza usted el día Sábado para hacer trabajo común?56.- Ningún cristiano del Nuevo Testamento hizo trabajo ordinario en el séptimo día, ni antes ni después de la resurrección. Muéstrenos un solo caso, y dejaremos de insistir en esto. ¿Por qué habrían de actuar los cristianos modernos en forma diferente a los cristianos de la Biblia?57.- No existe ningún registro de que Dios haya retirado sus bendiciones o su santificación del séptimo día.58.- Del mismo modo que el Sábado fue guardado en el Edén antes de la caída, así será observado en la tierra nueva después de la restauración (Isa. 66:22-23).59.- El Sábado, séptimo día, es una parte de la ley de Dios, tal como salió de Su boca y fue escrita por Su propio dedo sobre las tablas de piedra en el monte Sinaí (véase Exo. 20). Cuando Jesús comenzó Su obra, declaró expresamente que no había venido a destruir la ley: "No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas: no he venido para abrogar, sino para cumplir" (Mat. 5:17).60.- Jesús condenó severamente a los fariseos y los calificó de hipócritas por pretender amar a Dios mientras que al mismo tiempo invalidaban uno de los diez mandamientos por causa de sus tradiciones. La observancia del domingo no es más que una tradición de hombres. II.- Cuarenta Hechos Bíblicos con Respecto al Primer Día de la Semana.-1.- Lo primero que se registra en la Biblia es que el domingo, el primer día de la semana, es un día común de trabajo (Gén. 1:1-5). Esto fue determinado por el Creador mismo. Si Dios hizo la tierra en domingo, o primer día de la semana, ¿puede ser un acto de impiedad trabajar los domingos?2.- Dios ordenó a los hombres trabajar el primer día de la semana al incluirlo en el paquete de "seis días" de trabajo (Exo. 20:8-11). ¿Es erróneo obedecer esta ordenanza de Dios?3.- Ninguno de los patriarcas guardó jamás el domingo.4.- Ninguno de los santos profetas guardó jamás el domingo.5.- Por mandato expreso de Dios su pueblo santo usó el primer día de la semana como un día común de trabajo durante por lo menos 4.000 años.6.- Dios mismo lo incluye dentro del conjunto de los seis días de trabajo (Eze. 46:1).7.- Dios no descansó en ese día.8.- Dios nunca lo bendijo.9.- Cristo no descansó en ese día.10.- Jesús fue carpintero (Mar. 6:3), y trabajó en su taller durante 30 años. Él guardó el Sábado (como se señaló en los 60 hechos bíblicos anteriores a estos), pero trabajó los seis días de la semana, como todos admiten. Hizo mucho trabajo pesado los domingos.11.- Los apóstoles trabajaron el domingo durante toda su vida.12.- Los apóstoles nunca descansaron ese día.13.- Cristo nunca lo bendijo.14.- Nunca ha sido bendecido por ninguna autoridad divina.15.- Nunca ha sido santificado.16.- Jamás fue dada ninguna ley bíblica para imponer la observancia del domingo. De ahí que no es transgresión trabajar ese día. "Porque donde no hay ley tampoco hay transgresión" (Rom. 4:15; Juan 3:4).17.- El Nuevo Testamento no prohíbe en ninguna parte trabajar en ese día.18.- No existe ninguna penalidad en la Biblia por violar el domingo.19.- Ninguna bendición se promete para los que observan el domingo.20.- No conozco ninguna regulación en cuanto a la forma en que debía ser observado. ¿Sería ese el caso si Dios quisiera que lo observásemos?21.- Nunca se lo ha llamado el reposo cristiano.22.- Jamás se lo ha llamado Sábado.23.- Jamás se lo ha llamado día del Señor.24.- Jamás se lo ha llamado día de descanso.25.- Jamás se le ha aplicado ningún título sagrado. Entonces, ¿por qué habríamos nosotros de llamarlo santo?26.- Se llama simplemente "primer día de la semana".27.- Jesús nunca lo mencionó en ningún sentido, ni jamás el nombre de ese día estuvo en Sus labios, hasta lo muestran los registros.28.- La palabra domingo nunca aparece en la Biblia.29.- Ni Dios, ni Cristo, ni los hombres inspirados dijeron jamás una palabra inspirada en favor del domingo como día santo.30.- El primer día de la semana se menciona solamente ocho veces en todo el Nuevo Testamento (Mat 28:1; Mar. 16:2, 9; Luc. 24:1; Juan 20:1,19; Hechos 20:7; 1 Cor. 16:2).31.- Seis de estos textos se refieren al mismo primer día de la semana.32.- Pablo instruyó a los santos a que atendieran los asuntos seculares en ese día (1 Cor. 16:2).33.- En todo el Nuevo Testamento tenemos sólo un registro de una reunión (la Pascua) celebrada en ese día, y ésta tuvo lugar en la noche (Hechos 20:5-12).34.- No existe ninguna mención de que hayan celebrado alguna otra reunión antes o después de aquella.35.- No era la costumbre reunirse en ese día.36.- No hubo ningún requerimiento de partir el pan en ese día.37.- Sólo tenemos un registro de que se haya hecho algo en ese día (Hechos 20:7).38.- Eso se hizo en la noche, pasada la medianoche (versos 7-11). Jesús celebró la Pascua el jueves por la noche (Luc. 22), y los discípulos durante un tiempo la celebraban todos los días (Hechos 2:42-46).39.- La Biblia no dice en ninguna parte que el primer día de la semana conmemore la resurrección de Cristo. Esta es una tradición de los hombres, lo cual invalida la ley de Dios (Mat. 15:1-9). El bautismo es el que conmemora la sepultura y la resurrección de Jesús (Rom. 6:3-5).40.- Finalmente, el Nuevo Testamento guarda completo silencio con respecto a cualquier cambio del día de reposo o de cualquier intento de santificar el primer día de la semana.He aquí 100 hechos bíblicos indiscutibles sobre esta cuestión. Estos muestran conclusivamente que el séptimo día es el Sábado del Señor, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento. Este artículo fue impreso originalmente por la Review and Herald Publishing Association en el año 1885. Fue reimpreso en el libro "El Domingo Viene" de Edward Reid.Sábados Morales y Sábados CeremonialesEl Sábado moral es aquel que pertenece a la ley moral, o sea, a los diez mandamientos, y que fue creado junto con la aparición de este viejo planeta Tierra. Esto está en Génesis 2:2-3. Por otro lado, existen los sábados ceremoniales, que son aquellas fiestas de descanso (no nos olvidemos que la palabra sábado quiere decir descanso, y así es traducida en muchas versiones de la Biblia hoy en día) establecidas por Dios, pero que podían caer en cualquier día de la semana. Aun así, eran guardados, esto es, en aquellos días no se realizaba ningún trabajo, porque también eran considerados como siendo días santos, separados para Dios. La siguiente tabla comparativa podrá aclararnos un poco más estos dos conceptos, que tan fácilmente han confundido a muchos estudiosos de las Sagradas Escrituras.
Sábado Moral
Sábado Ceremonial
Instituido en la creación
Instituido en el Sinaí
Dios descansó
Dios no descansó
El propio Dios lo anunció y lo escribió con Su dedo Exodo 32:15-16
Dios procedió de modo diferente Deut. 31:24-26
Guardado cada semana; Exo. 20:8
Guardado una vez al año
El cuarto mandamiento no incluye sábados anuales Exo. 20:8
El sábado anual no incluye Sábados del Señor; Lev. 23:37-38
Es una señal eterna; Exo. 31:16-17
Debía cesar; Ose. 2:11 y Dan. 9:27
No fue abolido; Hechos 15:21; 17:1-2; 18:4; Mat. 24:20; Luc. 23:56.
Acabó en la cruz; Efe. 2:14-15; Col. 2:14-17;
Dios lo llama de mi Sábado Eze. 20:20; Lev. 19:30;
Dios lo llama de su Sábado Ose. 2:11; Isa. 1:13;
Los Sábados Ceremoniales.-La Biblia nos muestra que existen precisamente siete sábados ceremoniales o fiestas del antiguo Israel, fuera del Sábado semanal o moral (Lev.23:3). También son conocidos como pertenecientes a la ley Mosaica, porque fue Moisés que los escribió, y no Dios directamente. Esos sábados, fuera de los sábados del Señor (Lev. 23:38) son los siguientes:1.- La Pascua.-Podemos encontrar esta fiesta, a la cual tenían que comparecer todos los judíos (Exo.23:17), en Lev. 23:4-5; Exo. 23:14-15; 34:18 y en Deut. 16:1-8. Se celebraba a los 14 días del primer mes, Abib o Nisán.2.- El Pentecostés.-Esta fiesta la encontramos en Lev. 23:15-22 y en Deut. 16:9-12. Se celebraba 50 días después de la Pascua.3.- La Fiesta de las Trompetas.-Esta fiesta la encontramos en Lev. 23:23-25. Se celebraba el primer día del séptimo mes, Tishri. 4.- La Fiesta de los Tabernáculos, o de las Cabañas, o de las Tiendas.- Esta fiesta la podemos encontrar en Lev. 23:33-44. Se celebraba los días 15 del séptimo mes, Tishri.( Primer y último día de la fiesta)5.- El Día de la Expiación.-Este era considerado un día de juicio para Israel. Había santa convocación en este día. Nadie trabajaba, al igual que en los otros sábados ceremoniales. Pero este era un día todo especial para los Israelitas: en este día todos los pecados cometidos durante el año eclesiástico, eran perdonados. Los pecados simbólicamente colocados, día tras día, en el santuario terrestre a través del servicio expiatorio realizado por el sacerdote, eran ahora transferidos, a través de un macho cabrío, del santuario terrestre hacia el macho cabrío, y de este al desierto, donde moría. Este macho cabrío se llamaba Azazel y representa a Satanás. El otro macho cabrío, que era sacrificado en ese día, representa a Cristo, el verdadero Cordero de Dios que quita el pecado del mundo (Juan 1:29).Este trabajo tipificado por el sacerdote en el santuario terrestre, está ahora siendo realizado por Cristo en el santuario celestial, del cual el santuario terrestre era una figura, con todos sus servicios. Lea Hebreo capítulos 8 y 9 para mayores informaciones sobre este tema, y también lea todo el capítulo 16 de Levítico y Lev. 23:26-32. Se celebraba el día décimo del séptimo mes, Tishri. 6.- La Fiesta de los Panes Azimos.-Esto lo podemos encontrar en Lev. 23:6-8. Note que aquí hay dos sábados ceremoniales: el primer día y el último día de esta fiesta, con lo cual completamos los siete sábados ceremoniales. Se celebraba a los quince días del primer mes, Abib o Nisán. Duraba una semana.Por el hecho de que la cuenta de esos sábados dependía del inicio del año religioso, que por su vez se basaba en el calendario lunar, ellos podían caer en cualquier día de la semana. Cuando coincidían con el Sábado semanal o moral, ese día era llamado de "gran Sábado" (Juan 19:31).Todas estas fiestas tenían un profundo significado simbólico, y apuntaban todas hacia Cristo y a Su servicio expiatorio en el Santuario Celestial y a Su segunda venida.


Elena G. de White: Experiencia y Escritos
Arturo L. White

¿En qué forma entienden los adventistas la inspiración? ¿Es diferente este concepto del que se sustenta comúnmente?

El concepto adventista es diferente en algunos aspectos, pues ni participa de los puntos de vista liberales modernos que atacan la autoridad de la Palabra de Dios, ni de los conceptos ultraconservadores que hacen del profeta un autómata, una máquina, que es impulsado a hablar o escribir.
Como adventistas del séptimo día somos muy afortunados al estudiar este problema. Para sacar nuestras conclusiones, no dependemos de escritos de hace 19 siglos que nos han llegado mediante transcripciones y traducciones. Para nosotros la inspiración es algo casi contemporáneo, pues tenemos un profeta entre nosotros.
Y aún más: en lugar de tener unos pocos y cortos documentos o un puñado de cartas, poseemos los numerosos y variados escritos de Elena G. de White, redactados en un lapso de 70 años, que comprenden sus libros, sus 4.600 artículos, y sus manuscritos, cartas y diarios. También tenemos los testimonios de sus contemporáneos, que vivieron y trabajaron muy cerca de ella. Ellos y ella discutieron muchos puntos en cuanto a sus visiones y la forma en que le fueron dadas, y cómo ella impartía los mensajes a aquellos a quienes estaban dirigidos. En resumen: estos testigos discutían con ella la obra de la inspiración.
Y algo muy importante para nosotros: escribió en una lengua moderna, la más extendida, en la cual la estudian la mayoría, y los que no pueden hacerlo tienen a su alcance las traducciones de sus escritos más importantes o necesarios.
Si aceptamos a Elena G. de White como un testigo honesto, entonces nos serán muy significativos su obra, sus declaraciones sobre la inspiración, y su concepto en cuanto a los profetas de la antigüedad. Por esto, cuanto ella dijo del trabajo del profeta en acción, puede muy bien formar la base para llegar a una conclusión exacta en cuanto a la inspiración.
Primero notaremos que cuando el Señor imparte luz al profeta, él no se ata a un solo método: "Dios, habiendo hablado, de muchas maneras, por los profetas" (Heb. 1:1) Por lo tanto, no se debe buscar un método uniforme que gobierne los procedimientos divinos cuando entrega sus mensajes a sus instrumentos humanos. Esto es algo sumamente importante.
En segundo lugar, el profeta es y posee todas las cualidades propias de un ser humano: ve, escucha, huele, come, duerme, trabaja, habla, viaja, etc. Cuando es llamado al oficio profético, puede poseer o no cierto grado de conocimiento; pero a través de su obra profética continuará adquiriéndolo en la misma forma en que lo aprenden los demás. Su llamado como profeta no borra de su mente el conocimiento que obtuvo antes, ni tampoco entorpece sus facultades para proseguir adquiriendo conocimiento como lo hacía antes de ser llamado como profeta.
El hecho de que el Señor, en forma extraordinaria, haya llamado a una persona como profeta, la sitúa en una posición en donde recibirá información especial de Dios, la cual puede corresponder al campo de la teología y la experiencia religiosa, o bien al terreno histórico, refiriéndose a la providencia especial de Dios con su pueblo o las personas, o amonestando en cuanto a los peligros acerca de la determinación de Satanás de destruir la obra de Dios o la esperanza de las almas. También podría pertenecer al campo de la fisiología, la nutrición, la higiene, la educación, la administración de la iglesia, o aun podría tener que ver con la denuncia de pecados ocultos.
Como puede verse, los campos son ilimitados, porque la obra está en las manos de Dios. Esta experiencia singular pertenece al profeta. Aunque el Espíritu de Dios puede hablar a los corazones de las personas consagradas, no todos pueden ser profetas. Dios escoge al profeta: "Los santos hombres de Dios hablaron, inspirados por el Espíritu Santo." (2 Ped. 1: 21)
Las visiones y el testimonio
Un profeta puede recibir visiones durante el día, acompañadas por fenómenos físicos, (Dan. 10) o en la noche mediante sueños; (Dan. 7) luego comunicará el mensaje oralmente, en entrevistas o por escrito.
Hay, pues, dos asuntos inseparables: la recepción del mensaje, de la luz, y el testimonio que da validez o sea la presentación del mensaje, de la luz recibida del Espíritu Santo.
Puede ser que no se le permita comunicar inmediatamente el mensaje, pues quizá deba retenerlo hasta que sucedan ciertos acontecimientos; o bien la luz recibida es para orientar al profeta, quien no está en libertad de comunicar todo lo que ha recibido.
Por lo tanto, su mente puede ser un "depósito del cual previas circunstancias especiales" puede sacar y hablar. Pero a menudo hay necesidad inmediata de que comunique su mensaje.
Cómo recibió la luz Elena G. de White
Nótese la sencillez del lenguaje usado por E. G. de White para describir la forma en que recibió su primera visión: "Mientras estaba orando, el Espíritu Santo descendió sobre mí, y me pareció que me elevaba más y más, muy por encima del tenebroso mundo. Miré hacia la tierra para buscar al pueblo adventista, pero no lo hallé en parte alguna, y entonces una voz me dijo: 'Vuelve a mirar un poco más arriba.' Alcé los ojos y vi un sendero recto y angosto trazado muy por encima del mundo. El pueblo adventista andaba por ese sendero, en dirección a la ciudad que se veía en su último extremo" (PE, 14).
Observemos cómo y cuándo entra en visión: "El Espíritu Santo descendió sobre mí." Aunque permaneció corporalmente en la sala en donde oraba, le parecía
1. que se elevaba por encima del mundo;
2. que volvía su mirada hacia la tierra;
3. que no podía ver lo que buscaba;
4. que escuchaba una voz que le hablaba;
5. que obedecía la orden de esa voz;
6. que levantaba su mirada y veía al pueblo adventista en marcha;
7. que contemplaba su lugar de destino;
8. que se unía a ellos cuando se regocijaban por el galardón.
Es muy claro que las experiencias en la visión fueron reales para ella: vio, sintió, escuchó, obedeció y actuó en lugares lejanos; participaba en la acción, aunque corporalmente permanecía en la sala. Pero los que la acompañaban en ese momento, nada vieron, nada escucharon. Y más tarde relataba o escribía en sus propias palabras sus experiencias.
A menudo, ya en visión, era conducida a un hogar o a una institución, y luego llevada de salón en salón o de un departamento a otro. Le parecía estar en los comités y contemplar las acciones de sus miembros, escuchar sus palabras y observar el medio ambiente.
En 1887 escribió desde Europa a uno de los obreros en cuanto a las normas inadecuadas de una de las instituciones. ¿Cómo recibió la información? "Me levanté a las tres de esta madrugada con un gran peso en mi mente, En mis sueños me encontraba en y mi Guía me dijo que tomara en cuenta y observara todo cuanto viera. Me hallaba en un lugar apartado, desde donde no podía ver pero sí escuchar todo lo que sucedía en el salón. Las personas discutían con usted en cuanto a los presupuestos, y oí que disputaban con usted por los altos cobros de la pensión, el hospedaje y el tratamiento. Escuché que usted con voz firme y decidida rehusó rebajar lo que se cobraba. Yo estaba atónita de ver cuán alto era este cobro" (Carta 30, 1887).
A veces veía edificios aún no construidos, pero que serían parte de una institución. Ella se refirió a éstos en una carta escrita en 1903: �He estado pensando cómo, después que comenzamos el Sanatorio de Battle Creek, me fueron mostrados en visión los edificios del sanatorio, listos para ser ocupados. El Señor me instruyó en cuanto a cómo debe hacerse el trabajo en estos edificios para que ejerzan una influencia salvadora sobre los pacientes.
"Todo esto me parecía muy real, pero cuando me levanté, encontré que el trabajo aún no había sido hecho, que los edificios no habían sido construidos.
"En otra oportunidad se me mostró un edificio grande que se construía en el lugar sobre el cual se levantaría el Sanatorio de Battle Creek. Los hermanos estaban muy preocupados en cuanto a quién se haría cargo de la obra. Me sentí muy apesadumbrada. Una de las autoridades se levantó en medio de nosotros, y dijo: 'Aún no. Ustedes no están listos para invertir fondos en ese edificio, o para hacer planes para su dirección futura."
"En este tiempo se había colocado el fundamento del sanatorio. Pero necesitábamos aprender la lección de esperar". (Carta 135, 1903).
Representaciones simbólicas
Dos párrafos consecutivos de un testimonio personal dirigido a un obrero destacado de los primeros años, demuestran cómo las experiencias de la vida fueron algunas veces representadas simbólicamente: "Me fueron presentadas muchas otras escenas concernientes a su caso.
Usted me fue presentado una vez mientras trataba de empujar un carro largo por una elevada pendiente; pero este carro, en lugar de subir la colina, continuaba descendiendo. Este carro representa el negocio de los alimentos como una empresa comercial, la cual no ha sido llevada adelante en la forma que Dios recomienda.
"En otra oportunidad usted me fue representado como un general montado en un caballo, llevando un estandarte. Vino uno y tomó de su mano el estandarte, que tenía estas palabras: 'Los mandamientos de Dios y la fe de Jesús,' y fue pisoteado en el polvo. Lo vi a usted rodeado de hombres que lo identificaban con el mundo". (Carta 239, 1903).
A veces, los sucesos del pasado, el presente y el futuro gran abiertos delante de ella en forma panorámica. Entonces le parecía que presenciaba, en rápida sucesión, los eventos de la historia. He aquí una cita que nos muestra un poco cómo era iluminada su mente: "Al revelarme el Espíritu de Dios las grandes verdades de su Palabra, y las escenas del pasado y del porvenir, se me mandó que diese a conocer a otros lo que se me había mostrado, y que trazase un bosquejo de la historia de la lucha en las edades pasadas, y especialmente que la presentara de tal modo que derramase luz sobre la lucha futura que se va acercando con tanta rapidez." (CS, 13, 14, Intr.)
Artículo del suplemento de la Revista Adventista de enero de 1982
Pacific Press Publishing Association, 1350 Villa Street, Mountain View, California (USA

BUENOS CONSEJOS 2- (SALUD)



Las Calorías
Caminar quema 1.15 kilocalorías por kilogramo de peso por milla, a diferencia del correr que quema 1.7 kcal/kg/milla.

Por ejemplo si usted pesa 60 kg (132 lbs) estaría quemando unas 60 kcal por milla (1.6 kms). Para quemar 102 kcal (el equivalente de correr una milla) tendría que correr 1 1/2 millas (2.4 Kms).

Por lo tanto para obtener el mismo resultado que el correr agregue 1/2 milla por milla planificada.

Cuando camine, mantenga una postura erguida.

Mueva su brazos rítmicamente y ampliamente. Esto aumentara el gasto calórico.

Establezca como costumbre
Una agenda mental de lo que pensó antes, durante y después. Esto le ayudará a precisar en la mayoría de los casos de los días "buenos" o "malos". Una vez que sepa en su ciclo semanal o mensual de esos días malos, tórnelos en positvos o "buenos". Para lograr esto puede cambiar de ruta, de horario, de ropaje o vestimenta o de acompañante. Hágalo y notará la diferencia.
Un corta caminata a paso lento después de la cena promueve la digestión y aumenta velocidad de vaciado del contenido de su estómago
Lleve una contabilidad de cuantas millas ha recorrido, el tiempo que le ha tomano y el trayecto que uso.
Una vez a la semana de una caminata larga
Una vez al mes camine por un parque o bosque cercano.-

BUENOS CONSEJOS (SALUD)


El Caminar: el ejercicio ideal
Por
Pedro Martínez, M.D., C.M.C.M.
Artículo publicado por la Revista "El Centinela" en Julio, 1995

El caminar se ha tornado en una actividad muy popular. A parte de ser una forma excelente de ejercicio, a la luz de los hallazgos más recientes, se aproxima a ser la actividad ideal. Su flexibilidad le permite ser practicado casi en todas las circunstancias y lugares. Es gratis, segura y efectiva. No se necesitán habilidades o entrenamientos especiales. A pesar de esto menos del 10 % de la población norteamericana hace ejercicios tres o cuarto veces por semana. Esto es de acuerdo con el departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, mejor conocido por sus siglas en inglés HHS1
Sus alcance se proyectan desde el control de peso, hasta ser uno de los métodos más efectivos para vigorizar nuestra capacidad física, mental y espiritual. Dentro de su multiples beneficio, el caminar favorece al paciente hipertenso al ayudar a disminuir su presión arterial sanguínea; fortalece al corazón; disminuye los riesgos de la arteriosclerosis al disminuir los niveles de las lipoproteínas de baja densidad (i.e., colesterol malo en la jerga popular); además aumenta los niveles de las lipoproteínas de alta densidad (ie., colesterol bueno o protector)2 ; ayuda a reducir de peso y pudiera ayudar a prevenir la osteoporosis, 3 En la actualidad, el caminar se ha tornado en la actividad preferida para los pacientes en recuperación después de un ataque al corazón. En realidad, 8 de cada 10 personas mejorían su estado de salud si caminaran.4

Existen diferentes tipo de caminata. En primer lugar está aquella que se considera de baja intensidad, es decir a un ritmo o paso lento. Esto equivale a llevar un ritmo de 18-30 minutos por millas. Esta es la forma de caminata que se recomienda para empezar, en especial a las personas que están en sobrepeso, a los ancianos y para los que están sometidos al programa de rehabilitación cardíaca. A la anterior le sigue la caminata de intensidad moderada. Su ritmo es mas rápido (i.e., 14-17 minutos por milla). La mayoría de las personas que practican la caminata caen dentro de esta categoría. El tipo que le sigue se le considera de alta intensidad. Su ritmo o paso es mucho más rápido que el anterior (i.e., 10-13.5 minutos por milla). Este es un concepto practicamente nuevo para la mayoría de los que practican el arte del caminar. Es el equivalente a un trote lento. Por último está la caminata considerada de muy alta intensidad. Su ritmo o paso es rapidísimo (i.e., de 5.33 minutos, que es la marca mundial, a 10 minutos por milla). Esta última se considera como un deporte competitivo no como parte de un ejercicio diario5

Menos de dos veces por semana produce poco o ningún cambio significativo en nuestro cuerpo, insisten los expertos. Lo ideal es tres o más veces por semana. Pero si en los momentos presente no puede más de una a dos veces por semana, no se desanime. Empiece y verá que con el tiempo se le hará más agradable y placentero y sin darse cuenta notará que lo estará haciendo tres o más veces por semana. En cuanto a la distancia, recomiendo caminar por lo menos de 1-3 millas por semana como etapa inicial. Aumente gradualmente la frecuencia y la distancia. No se extralimite. Recuerde que si su objetivo es rebajar debera caminar tres o más millas por semana.

Muy importante es el planificar su rutina y su ruta. Asegúrese de apartar el tiempo necesario. No lo deje a la casualidad. Hágalo como una costumbre. Esto reforzará su voluntad. Recuerde que el caminar debe tornarse no en una obligación sino en un placer.
Vístase en forma adecuada y de acuerdo con los cambios climatológicos. Por eso es mejor estar sobreprotegido que lamentarse por la falta del mismo. Su zapatos deben ser bajo en peso (menos de 11 onzas) y que le ajusten comodamente. Los mismos deberían ser flexibles en su porción anterior pero con la suela del talón firme y con un buen arco de soporte y por lo menos de 1/4 a 1/2 pulgadas de espacio entre su dedos y el final del calzado. Cómprelo en la tarde y asegurese de medirlo con las medias que piensa usar para caminar. Asegurese de que su calzado este bien acolchinado, de manera que pueda ayudar absorbe el impacto de su pie con el suelo.

El caminar debiera ser el tiempo para respirar, para meditar y/o de mejorar su comunicación con Dios y con sus semejantes. Mire las nubes, siéntase parte de su ambiente. El caminar es un tónico para su mente como para su cuerpo.Esto impartirá vigor a sus fuerzas, robustecerá sus fuentes de energía y promoverá un estado emocional más vibrante. Usted le debe esto a su mente y a sus emociones. Notará que en la mayor parte del tiempo el mero hecho de caminar (i.e. el movimiento en si) le ayudara a tornar sus momentos bajos (i.e. emocianales) en momentos refrescantes y relajantes. Realmente el caminar sirve como una válvula de escape para el estrés.
Comience gradualmente, en especial si su familia le acompaña Camine unos 30 minutos dos a tres veces por semana. Aumente su distancia gradualmente cada semana. Comience a un ritmo que le sea cómodo. Aumente su velocidad lentamente. Haga ejercicios de estiramiento. 5 minutos antes y después de su caminata. Respire profundo cada 10-15 pasos las primeras 100 yardas. No camina entre las 10:30 am a 2:30 pm, a menos que lo haga en un lugar bajo techo. No abuse del ejercicio. Si nota que se le acorta la respiración o le es difícil hablar o se siente mareado o con dolor, pare y descanse. Si le es posible notifíque su doctor.

Usted puede caminar dentro de un centro comercial si es bastante grande y cerca de su hogar. Los centros comerciales ofrecen la ventaja de un ambiente controlado. Por lo tanto puede caminar sin importar las condiciones climatológicas. Además las posibilidades de que se aburra son menores.
El sábado es una gran oportunidad de caminar en la naturaleza. Facilitará su comunicación con Dios. Si no esta en plan de rebaja, planifique caminar antes del desayuno o la cena. Notará como se le incrementará su apetito. Una buena regla: si lo hace antes de la cena, sígale con cena donde haya una buena variedad de frutas. El beneficio será mucho mayor.

Para los expertos nada estimula más que una caminata, pero si se está recuperando de una enfermedad o posee problemas cardíaco, de diabetes, de hipertensión arterial, o cualquier enfermedad crónica o debilitante, consulte con su médico. Este reportaje no debiera sustituir el consejo de su médico.
Para terminar, recuerde que la clave de una caminata libre de accidentes es unos buenos zapatos. Además siempre trate en lo posible de caminar acompañado. Si lo hace muy temprano o al anochecer asegúrese que el lugar escogido tenga buen alumbrado eléctrico. Vístase con un ropaje o vestimenta cuyo material posea colores reflectivos. Por otro lado, lleve consigo algun tipo de identificación personal, en especial si es alérgico o usa lentes de contacto o esta tomando medicinas especiales. En lo posible lleve consigo un silbato o algun tipo de repelente. No se olvide de que debe de conocer el area por donde va a caminar.

1 U.S. Department of Health and Human Services. Healthy People 2000: National Health Promotion and Disease Prevention Objectives. 1990
2 Journal of the American Medical Association. December 1991; Vol 266, No. 23. Pags. 3295-3299
3 The Physician and Sportmedicine. Octubre 90; Vol 18, No. 10. Pag 36
4 The Phycisian and Sportsmedicine. August 88; Vol 16, No. 8. Page 148